Con el 14 de febrero a la vuelta de la esquina deberías empezar a planear la cita romántica perfecta y original para celebrar con tu amorcito. Ya sean peluches, bombones o rosas, siempre recurrimos a los mismos regalos de San Valentín para demostrar nuestro amor.
Si aún no sabes cómo impresionar a tu pareja, te vamos a dar una idea infalible y muy romántica: ir a un concierto a la luz de las velas. Luz tenue, canciones clásicas de amor y un ambiente tan íntimo que creerás estar viviendo dentro de una peli romántica. ¿No nos crees? Hemos preparado tres razones por las que deberías elegir Candlelight como tu plan romántico este 14 de febrero.
Es un concierto… ¡de música en vivo!
La música en directo hace todo sea mucho más especial. No se trata solo de los ritmos, sino de la energía, la conexión, la experiencia en su conjunto, esto hace de Candlelight una opción perfecta para tener una cita muy original el 14 de febrero. Olvídate de las listas de reproducción e incluso de los vinilos y, este San Valentín, apuesta por la música en vivo. Estar entre el público y sentir la música es una sensación irrepetible. Convierte tu cita en una cita llena de los mejores éxitos de Celine Dion, Elvis, Ed Sheeran, One Direction y más. ¡Escucha las canciones más románticas de todos los tiempos!
Es una oportunidad para sacar a pasear tu mejor outfit
Aquí tienes la oportunidad de dar rienda suelta a tu estilo. No necesitas ir de corbata ni con unos tacones altísimos, simplemente ponte algo que te haga sentir como el rey o la reina que eres. No se trata de ir a la peluquería y comprarte un outfit nuevo, sino de celebrar tu amor con estilo.
Además, si los dos salen como una pareja poderosa, prepararán el terreno para una noche no solo romántica, sino también digna de miles de fotos.
Es una experiencia musical única y muy especial
No es sólo un concierto, es toda una experiencia. Comienza con una elegante cena en su restaurante favorito antes del concierto o remata la noche con unas copas después del espectáculo. El tema de la luz de las velas se traslada suavemente del concierto a la cena, convirtiendo toda la cita romántica en una fiesta para los sentidos.